El ruido ambiental puede afectar la seguridad.
Que la señal acústica de un avisador acústico se escuche o no se escuche no solo depende del nivel acústico de salida generado y de la tecnología usada para crear la señal de la alarma. Los niveles de ruido ambiental y la ubicación del avisador acústico son elementos fundamentales que no se deben pasar por alto.
El ejemplo adyacente ilustra el efecto sobre el volumen de la cobertura de un dispositivo de señalización acústica de 100 dB(A) debido a un cambio de 10 dB(A) en el nivel de ruido ambiental. Al aumentar de 75 dB(A) a 85 dB(A) vemos que la señal de advertencia no se escucha.
Los valores de la Cobertura 3D muestran que el área de cobertura efectiva se reduce significativamente cuando el nivel de ruido ambiental aumenta. Si el diseñador del sistema de alarma no tiene en cuenta todos los aspectos, las consecuencias pueden ser graves para el personal que se mueve por esa área.